Hoy es un día de lluvia, acompaña a mi
corazón que tambien emana agua, agua de tristeza, por un amor que se va.
Los amores son como los niños, los
cuido, los mimo, les doy lo mejor de mí, pero un día vuelan y con ello un trocito
de mi vida.
Este desprendimiento sí que duele,
comprendo el motivo pero no puede parar el brote de lágrimas, una tras otra, la
mente lo razona todo pero el corazón lleva otros caminos.
Ahora es como si la mente estuviese en
una habitación sin apenas visibilidad, y el corazón ha tomado las riendas para
desaguar el peso que lleva.
Es mi obligación como ser humano dejar
que la vida fluya, y que cada persona fluya en el escenario de su vida,
permitiendo que el mundo ande y camine, sin ser obstáculo para nadie.
Solo puedo desear buen viaje a esos
amores que se marchan, para un mes, para unos años o para toda la vida.
Desearles que sus viajes sean los más
fructíferos y felices posible.
Buen viaje amor.
Preciosas palabras y nobles sentimientos. Seguro que tu capacidad de aceptación es igual de positiva.
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