Un avaro es una persona poco dispuesta a gastar dinero, e incluso renuncia a tener comodidades básicas. En la ficción, la avaricia se suele exagerar hasta el punto de que el avaro es un personaje tipo adinerado y codicioso que vive en la miseria con el fin de ahorrar y tener más dinero. El personaje Ebenezer Scrooge de Dickens es un ejemplo evidente.
Tacaño- Se dice de la persona poco dadivosa, que valora en exceso el dinero, o que es sumamente apegado al mismo, y tiene un interés en gastar lo menos posible.
He conocido una persona que reúne estás cualidades o mejor estos defectos de generosidad, a un estado muy elevado. Le he escuchado hablar y tiene miedo hasta de su sombra, ya acercándose a la muerte y tiene un miedo tremendo. Necesita ayuda y tiene dinero y anda en la miseria por no gastar ni un duro.
Por qué llegamos a estos extremos, por qué somos tacaños, por qué esto genera mucho miedo.
Todo empieza por miedo de ser pobre, o perder lo que se tiene, y poco a poco se va convirtiendo en una obsesión, que ya no importa si se tiene o no dinero, solo queda el sentimiento de miedo a no desaherse de nada.
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Los miedos van aumentando, así como la tacañería aumenta, creando una distorsión de la realidad, privando a la persona de poder disfrutar de lo poco o mucho que puede disfrutar, sumergiendole en el miedo a perder el dinero, viviendo situaciones miseras, en cuanto a todo lo que se relaciona a su alrededor, y sobre todo creando una especie de perfume que hace que nadie se acerque a tu alrededor, no por que sea tacaño, sino por el malestar que causa una sensación así.
Creo que todos tenemos un poco de este adjetivo, más o menos en una medida, porque sino seriamos totalmente desprendidos, y así no hay nadie. Es verdad que hay que tener precaución con el dinero, no gastarlo todo, pero también usarlo si es necesario, hacer un buen uso del dinero a veces es difícil, pero aquí radica el clic de la cuestión.
Aprender a dar cuando se debe dar y a recibir cuando se debe recibir, y hacer que esta energia circule a nuestro alrededor, sin apegarnos a sentimientos, pensamientos, o materia alguna.
Todo es teoría, pero siempre he creído que se empieza por la teoría, y poco a poco se intenta llevar a la práctica, y si uno se lo propone lo va consiguiendo.