Por mi experiencia, no veo que sea el camino enfocarme al miedo para vencerlo , porque el miedo es la consecuencia de una acción que en un momento de mi vida hice y que tuvo una repercusión negativa que no supe transformar, creando un rechazo a este hecho, y como ello miedo.
El miedo para mi es una sensación de agitación, de alteración en todo mi cuerpo, creando un malestar que incluso puede perjudicarme seriamente y condicionar mi vida.
He descubierto que esas puertas de las que he hablado en otra entrada EL TEATRO son las resistencias que tengo que lidiar y las causantes de los miedos implícitos en mí.
La cuestión es ir abriendo esas puertas.
Las voy abriendo de la siguiente manera.
Donde encuentro un NO dentro de mí, por ejemplo no quiero hacer esto, pues si surge el escenario en el que lo tengo que hacer, me pongo y lo hago, aunque en mi interior no quiera hacerlo por un sinfín de justificaciones
Y con este descubrimiento, compruebo que tengo tantos NOS como minutos el día, ¡esto es interminable!
Tengo tarea para rato.
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